martes, 13 de septiembre de 2011

Formas de decir las cosas.

Decía mi amigo Javi que la mejor forma de empezar una buena relación con el vecino del adosado, y ver el primer día que el niño se balancea como un simio en la valla de separación, no es decirle al rapaz:  "Niño, ¿por qué no te columpias en los cuernos de tu puta madre?". Aunque lo pienses, se debe uno acercar a él y con voz firme y amable decirle que no lo haga y que vaya a buscar a su madre. A mí, me ha dado buen resultado (hasta ahora) pedir el cese de actividades molestas de forma firme pero educada. También es verdad que no he tenido especímenes raros como vecinos. En todo caso, algún visitante que se emborracha y grita, pero es de vez en cuando. Un "buenos días" antes de dar un toque a alguien o un "por favor" ayudan mucho; lo que pasa es que son palabras en desuso o mal vistas. Por no hablar del estúpido "lo siento" que dicen los niños de ahora, en lugar de nuestro sonoro "perdón", fruto sin duda de tanta serie tonta y mal traducida.

Viene esto a cuenta de las formas de decir las cosas. Todavía recuerdo a la Chacón, la ministra del "Viva España" más falso que ha dado nunca un ministro (esa cara de asco con la que pidió: "Capitán, mande firmes.." cuando tomó posesión del cargo), esta acuñó eso de que los soldados españoles en Afganistán no están en la guerra, sino en "misión de paz en zona de conflicto".
Hay una tendencia a querer enmascarar las cosas, algunas de las cuales tienen un nombre sonoro, pero que por mor de lo políticamente correcto, acaba siendo sucintamente gilipollas. Y eso, sin mirar hacia lo de duplicar el genero para todos y todas. El castellano, al igual que toda lengua o código de comunicación tiene una función llamada "económica" (que también debe de estar en crisis...) y que consiste en dar la mayor cantidad de información posible con el menor número de elementos. Y esto incluía el plural genérico. Ahora, una panda de politiquillos deciden cómo debo hablar y escribir. Y una mierda.
 Recuerdo en los años de la transición, cuando para alejarse del franquismo y fardar de demócrata, moderno y solidario estaba mal visto decir Vascongadas y había que decir "Euskadi", palabrejo acuñado a medias entre "Euzkadi", en vascuence y la pronunciación fácil castellanizada. Igual pasa con la "parla de los vascos"; resulta que para no parecer un cavernícola, no debo decir vascuence ni vasco, tengo que decir "euskera". Y no sé por qué, porque debería escribirse "euskara", según algunos periódicos. Si alguien me lo puede explicar, lo agradeceré.
Ejemplos de esto hay muchos. Las razas/etnias; los negros subsaharianos/afroamericanos (y si ha nacido en Chamberí, ¿de qué raza es, aparte la humana?; los moros forman parte de mi historia y de mi "raza"; ¿y tengo que decir musulmanes?, pero si nacieron aquí!; los nativos americanos, los aborígenes... Yo soy nativo y aborígen de Madrid, ¡coño! y ciudadano del mundo.

Me fastidia especialmente lo de los topónimos y una regla básica de concordancia: si se habla en un idioma, úsense los topónimos en ese idioma. Los supuestos representantes del pueblo deciden en una votación, cogidos por las pelotas por los nacionalistas, que el estado debe utilizar las denominaciones que ellos deciden: el PP se bajó los pantalones con Pujol y el PSOE con la secta del PNV. Claro que la pasta que cuesta esto no la pagan ellos de su bolsillo. ¡Pobrecitos!
Y hablando de decir, hoy se despedía Zapatero del Senado. En un tono muy amable con sus colegas políticos, se han deseado lo mejor, y lo han dicho amablemente y en castellano. Tanto sistema de traducción de lenguas vernáculas (otra palabra que no hay que decir) y se lo han dichos todos todo en castellano. En el fondo, son todos las misma caterva, una panda de privilegiados, que viven en su mundo... por eso, han caído en la cuenta AHORA de que no se puede gastar más de lo que se tiene, de lo que se gana o de lo que a uno le pueden prestar. Por eso, ahora, recortan los suelos a los demás y quitan servicios públicos y los venden (AENA, y ya veremos que pasa con EFE); ahora van de ahorradores como la Cospedal en Castilla La Mancha, que se hace cruces de la deuda y sube el sueldo a sus colaboradores.
Los idiomas deben ser para entenderse, formar parte de las señas de identidad de cada cual, pero no se deben utilizar como arma o método de discriminación. Y de esto también hay ejemplos para aburrir.

Vd. lo pasen bien.

2 comentarios:

  1. Un gran Yeeeah por todo lo escrito aqui arriba...
    Lo poco que se es que mandan los que tienen dinero y sobre esos ay "algo" mas;ese algo quiere más y eso significa que los demas tengan menos...los demas somos los de siempre y eso no creo que cambie por mucho 15 de mayo que hagamos.
    se supone que vivimos en una democracia con libertad de expresion pero las expresiones estan proibidas o mal vistas...(prueba a gritar pene en plena Gran via,se giraran extrañados y pensaran que estas borracho)
    si estamos borrachos sigamos hablando ya que no mentimos...

    P.D. hagamos una cuenta de ahorros para invitar de copas a todo presidente ;)

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  2. me gusta lo de la cuenta de ahorro...

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