Hay un anuncio en la televisión (creo que es de un ambientador) en el que una ristra de niños con pinta de estarse haciendo sus necesidades encima aguardan poder aliviarse en la casa del tal Pablito, y encima el muy panoli mete prisa a su madre. Si yo fuera su madre les diría muy fina y educadamente: "Iros a cagar a vuestra puta casa".
Pero hay veces en las que uno no tiene las cosas tan claras. Se acerca una jornada de huelga general convocada hace...¿tres meses? por unos sindicatos que se han estado comiendo el morro y los mocos con un gobierno de cegatones y sectarios inútiles, que no han visto venir la que se nos veía encima. Unos sindicatos que se nutren de las subvenciones que les reparten alegremente, que recibieron un patrimonio sindical en los primeros años de la democracia (previamente robado por los fascistas al acabar la guerra) y cuya capacidad de gestión ha dejado algunos momentos imborrables como el escándalo de la PSV (ya saben, la constructora supuestamente "social" que sirvió para que "alguien" se quedara con unos cientos de millones de pesetas y para que muchos pringaos se quedaran sin piso y sin dinero).
Mi experiencia con los sindicatos es pésima, exceptuando el trato personal con algunos sindicalistas, que sí cumplen y que han contestado siempre que les he preguntado. El resto, para olvidar.
No me siento representado por ellos, pero me apetece dar una patada en el culo a un gobierno de inútiles, que ha recortado los salarios por decreto (que es algo muy gordo, ¡coño!), cosa que ni al gallego tirano se le ocurrió, que ha conseguido cotas históricas de paro y lo que es peor, de desesperanza para muchos.
Claro, que algunos (Marianico y sus pijillas) están deseando que la huelga salga bien para fastidiar al gobierno, pero no quieren que salga TAN bien para que los sindicatos definitivamente se hundan y dentro de unos años descuenten de los salarios los domingos que no trabajemos o que la sanidad nos la tengamos que pagar aparte, para que los amigos de los que mandan (ellos, claro) hagan negocio. De hecho, ya lo hacen con el tranvía de la ML2 y ML3 y se les hacen los dedos huéspedes de pensar lo que podrían sacar de cobrarnos las visitas al médico...
Esto está tan liado que al final, parece que el gobierno quiere que la huelga del transporte público en Madrid salga bien, es decir: que no llegue nadie a currar, porque así parecerá que los sindicatos luchan por su derechos contra unos "malos" que son los del gobierno de la Comunidad. Y eso no es así.
Yo estoy hecho un lío: si estoy en el paro, ¿puedo hacer huelga?, ¿cómo la hago?, ¿no barro?, ¿no hago las camas?.
Si mi mujer va a currar (porque en su gremio no tienen representación alguna los sindicatos convocantes)...¿puedo llevarla en coche si falla el tren de cercanías?. Lo digo porque si no va a trabajar le descontarán de la nómina una pasta, además del recorte ya aplicado por el gobierno. ¿Me sirve de algo hacer huelga?
¿Puede alguien ayudarme?
Yo, desde luego, les espero en las urnas. A unos y a otros. Es mi arma civilizada: el voto. Es que asaltar la Moncloa se hace un poco arduo...
nota: la foto la he tomado prestada de www.movilae.com
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