martes, 29 de junio de 2010

¡qué vergüenza!


Hoy escribo en caliente (que es como se debe escribir, pero no publicar, porque alguien puede acabar en un juzgado), a cuenta a la huelga del metro. Bueno, más exactamente, a cuenta de la información que veo y oigo sobre la huelga del metro y la negativa de los currantes a trabajar, ya sea ayudados por los piquetes, o voluntariamente, porque están convencidos de que el gobierno de la Comunidad de Madrid les quiere chulear.

Onda Cero me ha dado asco, pero el representante de Comisiones les ha plantado cara a los "todólogos", esos que hablan de cualquier cosa y siempre tienen razón.

Lo de Telemadrid es simple, lisa y llanamente vomitivo: el consejero de Transportes en plan chulo, amenazando con despidos y repitiendo "¿eh?" a modo de muletilla entre amenaza y amenaza; el clon de Julia Otero (creo que se llama Ely del Valle) con un guión bien estructurado, el director de informativos de la COPE (que ya se sabe), y un florero que apostilla las amenazas del consejero.

Ellos no viajan en metro; lo que pasa es que hoy están las calles hasta arriba de coches y eso SÍ les molesta (porque el autobús no lo ven ni de lejos). Pero ahora, dicen hoy, que les preocupa la gente, es decir: los ciudadanos. Esos ciudadanos a los que la Comunidad de Madrid subió el precio del billete de 10 viajes un 24 % en enero. Preguntas:

¿Dónde está ese dinero?

¿Cómo lo han gestionado?

¿Por qué la Comunidad no rebaja el gasto de 11 millones de euros en publicidad, publicidad que no trae más viajeros? . Perdón, ahora nos llaman: "clientes".

Por cierto, ¿a qué no adivinan a qué partido están vinculadas esas agencias?

y con conste: el primer fastidiado soy yo, que tengo que ir a Moncloa y me parece que me voy a ir en bici, y llegaré sudando, que vivo al otro lado del Manzanares, pero llegaré. Espero.


nota: la imagen la he tomado prestada de : http://www.iphonesoftware.es/

martes, 15 de junio de 2010

estoy empollando

pues eso, que estoy empollando, como en mis mejores tiempos de estudiante. Hacía unos años que no sentía esta sensación que rodea a mi cumpleaños (cuarentaycasicincuenta ya), que me ha acompañado toda la vida... ¡ah! haber nacido en enero, podrían pensar vds., pero no, es lo que tiene junio: eres de los pequeños del curso y tu cumple se abre paso entre exámenes. Este año es fabuloso lo que arrastro, pero ya me va quedando menos.
El día 25 es el primero de las oposiciones y durante julio tendré al menos otro. Pero mi venganza será terrible... siempre digo lo mismo y me conformo con invitar a los colegas a unas cervezas.
¡Que no falte!